lunes, 31 de diciembre de 2012

DESDE EL MONTE PIROLO



¡¡APARECIÓ  LA   MORCILLA!!


         Ante todo felicitar a todos los sobrevivientes de la catástrofe anunciada por los Mayas del día 21 del mes y año en curso y que para este año que viene que Dios nos coja confesados y a ver si nos da tiempo de comulgar antes de que nos cobren, que todo llegará. La felicitación que tengo es cachondona por eso no la he puesto en Nochegüena y sí para nochevieja y entrada de año, noche que con los vinos, licores y cavas a tutiplén a muchos/as les ponen…..el gorrito de Papá Noel y están guapísimos/as.

                                     
Si nos remitimos en este  mismo blog a los artículos que están en Curiosidades: ¡Para tirar cohetes I!, del día 05/06/12  y ¡Para tirar cohetes II! del día 20/06/12, nos daremos cuenta del porqué de los títulos de los dos artículos y de éste. Todos ellos alrededor de 2 serranas, hermosas y gemelas morcillas 2, de ganadería desconocida, que se daban como premio, a sortear, al que descifrara un cartel de toros escrito y publicitado en japonés.



 El sorteo no se celebró en el bar El Ancla, como se anunciaba, al quedar desierto el premio por falta de acertantes,  no obstante una sola de las morcillas gemelas sirvió para animar el cotarro de  ese día en el conocido, televisivo, tertuliano, artístico-intelectualóide y trianero bar desde que se trasladaron, por problemas de espacio, desde la archifamosa “Universidad del Puente” a dicho local,  personal, archivos y otras instalaciones. Algunas facultades dependientes del principal “Ente”  han quedado repartidas por distintos lugares del barrio, según dijo D. Manuel Cerrejón en el homenaje al “Perlo de Triana”.

                 

La otra morcilla   no estuvo de animadora porque   se fugó, nadie daba noticias de ella, días y días preguntando y nadie sabía tampoco el porqué dado lo a gusto que estaba en casa disfrutando de un sitio preferente en el Frigo. No nos hacíamos a la idea. Desesperados fuimos en busca del Torrente y le dijimos que el dinero  no era lo importante solo que apareciera y volviera a casa. Exponiéndonos a que Torrente se quedara con el dinero y la morcilla no nos importó, sabíamos que era el mejor y alguna noticia nos daría y suponiendo que cayera en sus manos y se perdiera de nuevo lo pasamos por alto, ¿en que mejores manos que las sudorosas de Torrente iba a estar?, por lo menos nos quedaríamos tranquilos y en paz. Pues ni por esas. Tampoco apareció.       
          


         Mi leonera que ha vuelto a recuperar su semblante, o sea otra vez hasta la boca, y tengo que dar un salto desde la puerta al sillón para no pisar el tapiz infame del suelo. El otro día intentando poner cosas donde podía y…. ¡Oh!, ¡Sorpresa!, en un rinconcito acogedor y tibio entre libros y revistas apareció la morcilla perdida  pero, ¡ojo!, no estaba sola, estaba acompañada de un bebé híbrido, berrendo en colorao en términos taurinos,  y de un chorizo alto, delgado, rojo, brillante, elegante y, a más pedir, de los aderezados con pimentón picante, exclusivos,  rodeados de fruta dionisiaca y  como a “güen entendedor con pocas palabras basta” lo comprendí todo al primen golpe de vista.


                                     
El encuentro, dentro de la inmensa alegría, sirvió también para reencontrarme con desordenadas y viejas revistas “Triana” y en una de ellas llamó mi atención un artículo firmado por Baldomero Morillo Bernal, “Los amigos de Konan”.  El artículo cuenta que una Delegación de la ciudad de Yokohama tuvo la gentileza de visitar Triana con la pretensión de hermanar nuestro arrabal con el barrio de Konan de dicha ciudad japonesa.
La visita se realizó -antes de la oficial-  con el objeto de conocer Triana con anterioridad. Hablamos de un artículo que refiere una visita de hace veintiocho año. Al final hubo una cena en el hotel Alfonso XIII y se dirían a los postres los discursos pertinentes que por parte de nuestra representación trianera nos los debemos suponer ya que no se hace en el artículo referencia alguna, pero si en cuanto a los discursos japoneses aunque no de su traducción.
                         
  
Como la curiosidad no tiene límites, la mía tampoco, quisiera tener noticias, con el debido respeto ya que no dispongo de ellas,  si se llevó a cabo la visita oficial, el hermanamiento y si se han continuados las visitas de cortesía y sobre todo tengo un interés desmedido en saber que dijeron en su discurso los amigos de Yokohama para ello he reflejado en este blog el discurso escrito -tuvo que ser importante porque ocupó dos páginas-  por si algún traductor tiene a bien darlo a conocer en los comentarios o en un artículo especial dedicado también a saber como están al día de hoy las relaciones, los pros y los contras del hermanamiento.
Si se lleva a cabo la traducción, entre  los acertantes se sorteará un familiar de la mamá morcilla ya que ella y su vástago están en periodo de lactancia. Si puedo “prometer y prometo” que si el día es benigno llevaré la familia a darla a conocer, desgraciadamente no completa porque el padre sufrió un desgraciado accidente de heridas por arma blanca en el Corral de los Artesanos y aunque se hizo todo lo posible por encontrarlo para reanimarlo en un mal pronto de “¡abracadabra, pata de cabra!, nunca lo volvimos a  ver. ¡Ande andará!.

                          
            De todo ello la celebración se hará en el Bar “El Ancla”, en su tertulia, el día se dará a conocer con anterioridad, creo que será en uno de los días  entre año nuevo y el 6 de Enero, día que recomiendo a todos creer en los Reyes Magos, para que no se pierda el niño que llevamos dentro ni la magia, ni la utopía, ni la ilusión y para ello recomiendo ver aunque sea solo una cabalgata y si es la de Triana pues diez veces mejor y cuidado con los caramelazos.
¡¡¡Felicidades!!!.

Antonio del Puente
Pascua-2012

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sábado, 29 de diciembre de 2012

DE LA CASA DE LOS ARTESANOS A LA DE LOS MENSAQUE



Nos gustaría haber terminado el año felicitando a los inquilinos de la Casa de los Mensaque por la gestión realizada. Sin embargo son muchos los puntos negativos y, en menos de dos años, han demostrado el escaso interés por nuestro arrabal. Ya no se ve a Sr. Zoido paseando por nuestras calles; no hay votos a la vista. Del tan cacareado plan turístico mejor no hablar y mientras tanto el número de parados  aumenta  progresivamente

En una entrada reciente nos preguntábamos qué hacían los turistas cuando llegaban a Triana. Nada está señalizado adecuadamente: ninguno de los monumentos o elementos de interés  se muestran con un directorio que, mediante una breve reseña, pueda enamorar al visitante y que definitivamente lo invite a pasar. Sólo es cuestión de copiar las estrategias  que desarrollan en otras ciudades,  algunas incluso con bastante menos patrimonio que Triana.

Es incomprensible que en una ciudad como Sevilla, donde tenemos: la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía, el Patronato Municipal de Turismo, un Instituto de la Cultura y las Artes, la propia Diputación Provincial que también posee sociedades promocionando el turismo y como siempre las 11 Juntas Municipales de Distrito, no sean capaces de tener un proyecto turístico serio y eficaz.

También hemos denunciado en este blog el estado en que se encuentran algunos elementos patrimoniales de suma importancia para Triana:  el estado ruinoso que presenta el Arquillo de la O, las mal rematadas fachadas del Museo de la Cerámica y el Corral de la Encarnación,  las diversas y desconocidas casas de vecinos que se presentan ante los visitantes con sus puertas cerradas, las múltiples que pasan desapercibidas pese a mostrar un encanto como pocas pero que ni siquiera están anunciadas en una simple guía. No vamos a seguir repitiendo  lo que muchos trianeros llevan denunciando durante tanto tiempo; esto es como pregonar en el desierto.

Sin embargo nos vamos a parar ante una casa emblemática y destacada. Se trata de la Casa de los Mensaque: una joya  construida en 1900, salvada de la especulación por Paco Arcas en la década de los 80  y que, tras su posterior adaptación, ha servido como sede del Distrito de manera continuada. Lo que en la actualidad debería ser un edificio fundamental para la promoción turística de Triana se ha convertido en el edificio público que alberga al amplio equipo municipal de nuestro Distrito y que no sabemos bien qué es lo que gestiona. De nuevo la pregunta: con la crisis que estamos padeciendo – no todos los españoles- ¿qué hacen tanta gente ocupando este edificio? ¿No entra esta política municipal del Sr. Zoido en contradicción con  las teorías y consejos de su gran jefe Rajoy? Pero si observamos con detenimiento el estado de la Casa de los Mensaque vemos que el único recorte que ha ocurrido ha sido  en mantenimiento. Vean el siguiente reportaje fotográfico y saquen ustedes mismos las conclusiones.





Para mayor desfachatez,  a los ciudadanos nos obligan , mediante ordenanza municipal concreta, a mantener nuestras edificaciones en condiciones de seguridad, salubridad y ornato público, realizando para ello los trabajos y obras necesarias. Y claro, para ello el mejor ejemplo: La Casa de los Mensaque. Observen que no se trata sólo de falta de mantenimiento  ornamental; en las siguientes fotografías se aprecian grietas, desprendimientos de los revestimientos, humedades en los balcones con el consiguiente peligro de rotura y para colmo terminan anclando las sujeciones del alumbrado de pascua al maltrecho paramento de la Casa.






Es evidente que poco podemos esperar de quienes son incapaces de conservar un patrimonio tan valioso, de los que incumplen incluso hasta las ordenanzas que obligan al resto y de los que tienen tan mal gusto como el de anunciar un evento público de Triana mediante un folio pegado con papel adhesivo  en la fachada de una casa que tiene 112 años. ¿Hasta cuándo tenemos que soportarlos?



José Luis Jiménez

jueves, 27 de diciembre de 2012

EL DEDO DE RODRIGO


“El Pichi”

Manolo Jiménez (derecha), posa junto al autor de su biografía, Jesús Penabad, y un ejemplar de la misma. Fuente: Diario Atlántico

    Así le decíamos; así se le nombraba en Triana, su barrio. Vivía en el famoso corral de la Parra, y decimos famoso porque era esta casa de los tiempos de Ariño (XVI-XVII) y porque fue escogido como el lugar donde moraba un personaje de ficción nada menos que de Armando Palacios Valdés; nos referimos a su obra La hermana San Sulpicio. “...comprendí que llevaba el nombre por una parra que tapaba un trecho del pasadizo enredándose por palitroques viejos...”. Del gran patio vecinal al que serviría de casa-tapón, desde 1929, el edificio de la Casa de Socorro, llegaba su equipo de fútbol con aires triunfadores al Campillo, o “campo del polvo”, descampado de la calle San Vicente de Paúl (donde hoy Los Comerciales), que constituía un abierto paraíso para los chiquillos de media Triana, especialmente para los que vivíamos cerca. Y llegaban para dirimir sus encuentros con otros equipos bien asentados en aquel terreno de juego, como el que formamos en la Cava de los Civiles o el que llegaba de la calle Procurador, donde jugaban algunos imberbes muy diestros que luego sabrían lo que era enfundarse un uniforme gratis y correr por campos de césped.

    En el equipo del corral de la Parra venía “El Pichi”, un menudo jugador -de ahí el mote- marcado por lo que se llamaba un antojo que cubría parte de su rostro y por una pierna izquierda que era un cañón de misteriosa y demoledora pólvora. En uno de aquellos partidos en los que la honra estaba por encima del banderín casero que nos jugábamos, particularmente supe de la potencia de sus chuts -como digo, de extraño origen- por un pelotazo con su firma que me causó un imborrable mapa morado sobre las costillas. Cualquier cosa era “El Pichi”, sin duda la estrella de aquel aguerrido equipo de la calle San Jacinto.

    Un día nos enteramos que lo había captado el Betis, lo que no le impedió seguir jugando en el Campillo, y si antes se le temía, ahora el marcarle era un suplicio porque se notaba que estaba mejor alimentado. Y otro día nos llegó la noticia de que lo había fichado nada menos que el Barcelona, y ahí perdimos de vista al Pichi, lo que  no ocurrió con otros muchachos del barrio tras pasar por el Sevilla o el Betis. Ya era Jiménez, un delantero que apuntaba alto, pero casi siempre dentro de la portería. Así que supimos de él por las retransmisiones radiadas de los partidos del Barcelona y, después, del Celta de Vigo, su impensado y definitivo destino profesional y familiar.

    Siete temporadas jugó en el equipo de la localidad gallega, consiguiendo hacerse con el cariño de los aficionados y conquistar, a continuación, el de toda la ciudad. Disfrutó de ganarle al Madrid con uno de sus goles, de jugar la UEFA -la primera vez que lo conseguía el Celta- y de ser el máximo goleador de su equipo y, no olvida, que la temporada de su ingreso colaboró en el ascenso a Primera División. 

    Y, transcurrida una eternidad, volvemos a verlo... “Memoria de un celtista de Triana”, es el subtítulo de su biografía escrita por uno de sus admiradores, de esos que no olvidan, Jesús Penabad se llama. El libro se ha presentado recientemente y el acto constituyó un sentido homenaje a su persona por todo lo que aportó al club vigués y, especialmente, por la amorosa y agradecida querencia que demostró al lugar que lo acogió para siempre. “Manolo Jiménez Rodríguez, uno de los jugadores de más talento que se ha enfundado nunca la camiseta celeste”, se dijo en la presentación, palabras que hemos leído en el medio que nos trajo esos recuerdos con los que comenzamos a escribir. La foto que ilustra la noticia, divulgada por el periódico “Atlántico”, no nos despista: es “El Pichi”; la misma cara, ahora con gafas. Tiene buen aspecto aunque, si nos fijamos, necesita el apoyo de un bastón para ayudarse por la derecha porque, sin duda, la izquierda lo soporta sobrada de energía.

    Nuestro camarada José Luis Jiménez, al que también le llegó la noticia -aunque por razones de edad no lo conoció- ya se ha puesto en contacto con el autor del libro para conseguir algún ejemplar. Y no sería mala idea que fuera presentado en su barrio, porque Triana seguro ocupará un interesante capítulo en la vida escrita de un humilde chiquillo que por su habilidad, esfuerzo y fidelidad alcanzó mucho más de lo que se podía aspirar en aquella Triana de remiendos y alpargatas de los años cincuenta. 


Ángel Vela Nieto      

martes, 25 de diciembre de 2012

LA CASA DE LOS ARTESANOS: NUESTRO BALUARTE




Ni el mejor de los  apuntalamiento ni la mejor obra de rehabilitación podrán consolidar tanto los históricos muros de la Casa de los Artesanos como el aliento y cariño que, el pasado sábado, dejamos una multitud de trianeros reunidos en torno a una mesa llena de viandas y con el acompañamiento de una candelá. A primera hora de la mañana comenzamos los preparativos  adecentado el sitio del retablo; unas nuevas  macetas floridas  y la colocación de unos azulejos  reivindicaban  La Esperanza y la conservación de la Casa. Como el acto no estuvo subvencionado por el Distrito las viandas fueron proporcionadas entre todos los asistentes.





  
Desde primera hora no faltó la animación musical con la hija de Augusto y su pareja que nos improvisaron un excelente escenario perfectamente ambientado con micrófonos, teclados y todos los avíos necesarios para un magnífico sonido.  Diversos artistas fueron desfilando por la palestra dejándonos  muestra de un variado repertorio donde  no pudieron faltar las pinceladas de El Bari. A medida que avanzaba la jornada el  ambiente se fue volviendo cada vez más bohemio. El duende que pululaba por la calle, y del que esta tomó su nombre a mitad del siglo XIX, apareció por el patio y los cantes y bailes se sucedían sin respiro. Las velas y las candelás  proyectaban sombras y luces, cada vez más flamencas, sobre el desgastado pavimento del corral.








Durante todo el día no cesaron las peregrinaciones de personas y poco antes de las 5 de la tarde el condumio comenzó a escasear. Pero todo volvió a la normalidad  gracias a que “Antonio del Puente” se acercó a Monte Pirolo y se trajo dos garrafas de mosto, una olla de cola de toro, una sartén de asadura y un lebrillo de pestiños –por poco se trae de su casa hasta el Portal de Belén-; también aparecieron dos botellas de bebidas aguardientosas y una  nueva colecta con fines cerveceros.





Memorable e histórico encuentro, con auténtico sabor a Triana, el que tuvimos la suerte de vivir el pasado sábado en este mágico lugar que debemos convertir en un nuevo bastión de la defensa de Triana.

Se echaron en falta, aunque fueron debidamente recordados durante el acto,  a los nuevos miembros de la Junta de  la Hermandad de la Esperanza de Triana, al propietario y, por supuesto, a algún representante del Distrito Municipal que, pese a que fueron invitados, declinaron la invitación.

José Luis Jiménez

Las fotografías, realizadas por Elisa Santos Donaire y Rafael Martín Holgado, quedan a disposición del que quiera usarla sin que por ello sea acusado de expolio.



lunes, 24 de diciembre de 2012

DE PASEO: LA CASA DE LOS ARTESANOS




esta casa es un milagro que se esconde en la calle Covadonga, un corral que se deshace en silencio, que se deja llevar por el tiempo camino de la nada, pero sus moradores actuales la muestran orgullosos, como un tesoro, porque los artesanos pueden con facilidad imaginar cómo quedaría arreglada, na más hay que darle caló, le escuché a alguien el otro día, de los caliches cuelgan unos recuerdos, que no eres consciente de tener, pero que al estar allí se hacen presentes como el aroma de alhucema de la casa de tu abuela o el sabor de los primeros besos con tu amada…



¿cómo puede alguien dejar tan bellos rincones caerse de aburrimiento?, se ha quedado la casa sin el retablo, despojada de una parte de su Historia y si nadie lo remedia, se tumbarán sus muros y el eco de los alfareros que allí trabajaron, sus arcos de ladrillos no hacen falta, para eso tenemos el nuevo museo, corren tiempos virtuales y en vez de levantar este trocito de arte hacia el futuro, nos contentamos con guardar las vivencias en fotografías y cerámicas, dejamos que la vida de los artesanos se acabe para sublimar su recuerdo en las tristes paredes de un museo, el hombre es así de incongruente, le parece vital lo que ha perdido, y no lucha por lo que puede mantener…   



esta casa es un milagro que se nos escapa, el taller de Augusto es un laberinto donde perderse es un juego sin fin, y se acumulan proyectos, útiles, sueños, olvidos, que hacen flotar la magia en una atmósfera espesa que te envuelve, el sábado pasado quisimos estar allí para no olvidar el retablo perdido, cantó el Bari, ojitos cerrados, sentimiento o ya estaba sintiendo el olor de la asadura, y esa media sonrisa de niño alegre delante de un lebrillo de pestiños… 





Rafael Martín Holgado

domingo, 23 de diciembre de 2012

EL DEDO DE RODRIGO




RAMONCITO EN LA CASA DE LOS ARTESANOS


    A Ramoncito como a su abu le gustan las Pascuas de Navidad y hoy, para celebrar la mañana de los “mil euros” cantados por las mismas voces de las “diez mil pesetas” de los cincuenta, hemos visitado el hermoso Nacimiento instalado en las ruinas del Castillo de la Inquisición. Luego, tras proveernos de chuches en el kiosco del Altozano, nos encaminamos hacia “El Ancla”, lugar de concentración de un nutrido de entusiastas paisanos dispuestos a rendir pleitesía a los venerados y mártires muros de la Casa de los Artesanos. La verdad es que hemos ido todos como quien visita a un amigo enfermo para inyectarle ánimo y cariño después de sufrir una dolorosa amputación.

    Las dos Triana, la calé y la gaché, se arrejuntaron en su patio en torno a una mesa con viandas como cuando vibraban los corrales de la Cava. Rostros felices que, en seguida, se vieron reflejados en la faz de la casa. Una pareja de jóvenes músicos, con todos sus avíos de instrumentos y sonido -ella, la preciosa hija de Augusto; él, un maestro del teclado-, abrieron la tarde, que tanto prometía, con hermosas canciones. La casa rió, cantó y bailó -con la prótesis bien ajustada- cuando “El Vari” desplegó un increíble popurrí festero; Triana pura sonaba en la calle Covadonga. Y para Augusto, Andrés Dominguez, Alfonso Orce y Paco Vega, representantes anfitriones de los artistas inquilinos, dejó ésta de ser una trinchera en plena batalla para aparecer como un ensueño.

    Ramoncito en su mundo... “Abu, una fiesta, qué bien...”. No paraba; él, que contesta cuando le preguntan su nombre que es de Triana y se llama Ramón “el caza-fantasmas”, recorría todos los rincones del laberinto de escaleras y puertas, decoradas de verdina y moho tan a propósito, dispuesto a desintegrar los fantasmas y monstruos que aparecieran con malos mengues. Le tengo dicho que existen fantasmas buenos, y al primero que vimos de estos -yo iba de guardaespaldas- fue a Joselito Ruiz Flores, el entrañable industrial que convirtió en altar el patio de su tejar con un retablo de su venerada Esperanza, recientemente amputado. También pululaba por allí,  envuelto -como Joselito- en una nube de algodón de azúcar, su tío abuelo Juan Vela, que ocupó uno de los tornos alfareros. Y hasta creyó contemplar el fantasma de su abu, disfrazado de niño, deambulando y esperando que su hermano Juan acabara de almorzar para volver con la fiambrera a casa. De los malos no dejó ni uno, porque los había y muchos... Chisssssssssssss, disparaba rayos a diestro y siniestro con su pose bien estudiada. “¡Abu, cuidaro...!”.Y el abu sin poder meterle mano ni al mosto, ni al chorizo ni a las interesantes conversaciones. Todo era por la purificación de lugar tan atacado...

    Ni a las tres ni a las cuatro ni a las cinco, a Ramoncito, que deseó por el micrófono feliz Navidad a los amigos asistentes antes de repartir las gominolas supervivientes, no había quien lo sacara del patio. Pepa Montes limpió sus pringados deditos y, empeñado, los puso sobre el teclado tarareando uno de los villancicos que le han enseñado en su primer curso de cole, luego soltó una retahíla ante el micrófono para acabar avisando de que continuaba con su tarea “cazafantasmas”. En esto, entramos en el taller de Augusto y, curiosamente, no sólo no se asustó con la exposición de rostros y figuras que el escultor conserva por estantes y rincones, algunos en verdad inquietantes, sino que los acarició como queriendo comprobar si harían algún gesto notando su mano. No había fantasmas en el estudio; él es un especialista. 

    Pero a la tercera llamada de su madre tuvimos que hacer mutis de aquel lugar insólito donde estaba transcurriendo una jornada histórica, un día de esos que quedan grabados en la intrahistoria de Triana. Muchas fotos lo recordarán, y cuando Ramoncito, pasado el tiempo, las contemple se dará cuenta de que fue inocente testigo de un hecho con el que su barrio demostró que estaba vivo y que mantenía alto su orgullo. 

    De momento no ha quedado allí ni un fantasma con malas ideas.


Ángel Vela Nieto      

viernes, 21 de diciembre de 2012

DE PASEO: GRISES MAÑANAS





se ha empeñado el tiempo en recibir al invierno con unas mañanas grises, que no invitan a salir de casa, te pasas el día mirando por la ventana en espera de que el sol termine por deshilachar el tejido de nubes y se coloreen las calles con su luz, pero todo lo más que puede verse de vez en cuando es un círculo blanquecino sin fuerza, sin embargo quedarme en la casa me cansa, me falta aire, necesito ver alguna cara conocida, escuchar el ruido de los carritos que se aproximan a los colegios, formar parte de ese andar diario de los primeros compradores, por eso me encamino por Santa Cecilia hacia la calle San Jacinto, inmensa desde que han afeitado a los árboles, y la encuentro llena de muñones vegetales que se estiran como si quisieran escapar de la molesta humedad que rocía el espacio, pero no hace frío, tan sólo siento el frío que emana de la Casa de los Artesanos, un frío triste de escarchas y desconchones, de ausencia sentida, de recuerdos rotos, de Historia herida… 





en estas mañanas grises no hay más cielo que esas estrellas apagadas, falsas, que de noche pretenden llevarte al oriente de los comercios, mientras avanzo no dejo de mirar los ladrillos de la fachada del Protectorado, que sin las miles de hojas y ramas de las tipuanas, lucen por hileras, en incansable orden, pero también son capaces de doblarse aquí y allá para crear adornos geométricos, y de disponerse en diferentes planos, hasta que aparecen los volúmenes tras el juego de las luces y las sombras, esos ladrillos me parecen el triunfo natural de la humildad, del trabajo diario, callado, responsable, de la gente de bien...





al llegar a la iglesia giro a la izquierda por Pagés del Corro y quedo sorprendido por un enorme reclamo publicitario que han colgado de los balcones, Noches de TRiana, suena bien, me suena a tangos del Titi, a noches cálidas alrededor de una candela, dan ganas de traspasar esa puerta mágica y aparecer en las noches antiguas de TRiana que no pudimos vivir, un tiempo de miseria que el tiempo ha vestido de gloria y cultura, pero los viajes al pasado no tienen ofertas, esas letras pintadas de rojo carmesí me hacen pensar, seis horas, parece mucho, acaso no tendría usted otra promoción de hora y media, lo digo por la siesta...    





Rafael Martín Holgado   

jueves, 20 de diciembre de 2012

TERTULIA EN LA CASA DE LOS ARTESANOS



Para que regrese la esperanza y  poner fin a un año nefasto, los artesanos de la casa expoliada y algunos amigos más han organizado un encuentro en la citada Casa de los Artesanos el sábado 22 de diciembre a mediodía. El objetivo es llenar la casa del mejor de los espíritus: el  que le daremos los  bienaventurados hijos de este Barrio hablando y sintiendo a  Triana en el interior de sus ruinosos muros. 

No podemos permanecer  impasibles mirando como arruinan la casa. Luchamos contra unos  especuladores que no descansan y que cada día actúan con más impunidad y la  complacencia de los que no han tenido la decencia para denunciar públicamente este expolio. Luchamos contra los que, en palanganas de acero inoxidable, se lavan sus sucias manos arrojándote luego el agua a la cara,  contra los que aprovechándose del prójimo sanean sus divinas propiedades echando los escombros a la calle y en definitiva contra los que lo primero que te roban es lo último que se pierde.

Dado que el evento no cuenta con subvención, sería muy de agradecer la asistencia al acto con algunas viandas que serán compartidas entre todos los asistentes. La tertulia promete y a buen seguro que terminamos cantando villancicos.

 SABADO, 22 DE DICIEMBRE, MEDIODÍA. EN LA CASA DE LOS ARTESANOS 

¿Qué mejor día y lugar para brindar por TRIANA?

José Luis Jiménez

martes, 18 de diciembre de 2012

SIN ESPERANZA EN TRIANA


Advocación del Mayor Dolor y Traspaso (entre la calle Covadonga y la Calle Pureza)


No, Sr. Delegado, no son días de Esperanza en Triana, tal y como nos señala en su nuevo blog, pagado por todos los sevillanos con dinero público; otros 30 millones de pesetas para contribuir a mantener su gobierno municipal. No se ha conformado con mirar para las urnas ante el expolio orquestado que supone un atentado brutal contra el patrimonio del barrio que usted trata de representar, no, no ha sido suficiente,  además. y para mayor escarnio, ha tenido que incitar en su blog, el pagado con dinero público,  a que pasemos estos días por la Capilla de la Esperanza de Triana. Ya sabemos qué guardaban detrás del plástico negro y, efectivamente, era lo que temíamos: el retablo que conmemoraba la estancia de la Virgen de la Esperanza en la Casa de los Artesanos y que la propia hermandad que la venera, con el consentimiento necesario del propietario de la casa y ante la vista gorda de las autoridades:  la suya y la de su jefe, Sr. Delegado, arrancó para desvalorizar y dejar sin Esperanza la mencionada Casa.

Que la Hermandad más antigua de Triana le haga este flaco favor al barrio que la acoge es algo inconcebible pero que demuestra lo poco que  le importa lo que ocurre fuera de su capilla, o sea, en su barrio. Al fin y al cabo  sus objetivos son los de dorar y platear, hasta límites que se salen de la propia fe de la Iglesia que los ampara, su patrimonio material, realizar una estación de penitencia a la Catedral y desarrollar diversos actos internos, entre ellos los que el Sr. Delegado publicita en su nuevo blog.

Que un Trianero de Honor mantenga en estado ruinoso un edificio tan emblemático y necesario para el barrio que lo ha honorificado, por deseo expreso del recién llegado delegado, es un acto de cinismo y que demuestra lo poco que le importa este arrabal más allá de la contribución a su cuenta general de resultados, que arroja  excelentes beneficios en su dilatada historia.

Que el Delegado del Distrito no se haya puesto al frente de la defensa de la Casa de los Artesanos y que por el contrario oferte, en su blog público, la asistencia a actos religiosos promovidos por la Hermandad que ha protagonizado el hecho controvertido demuestra que lo único que le importa son los votos y que siempre mirará hacia las urnas, respetando las ordenes de su jefe, el Sr. Alcalde, con el que forma un magnífico tándem con el objetivo puesto en la casa de los Montpensier.

Que una legión de beduinos, a los que sólo les importa un retrato y una sonrisa con su rey mago, se hayan escondido durante todos estos días que ha durado el expolio y que, al igual que su ídolo, mantengan silencio es un síntoma de la necrosis urgente que tenemos que extirpar en este barrio.

No, no vamos a dejar este asunto. Vamos a promover que los artesanos de la Casa recurran al amparo judicial. Queremos creer en la justicia, en ese  poder que los nuevos gobernantes del PP quieren poner sólo al servicio de la clase pudiente. Ese retablo nunca debió salir del lugar en el que estaba sin el acuerdo de los inquilinos de la Casa, por mucho que el propietario lo hubiese autorizado. Y si la justicia les retira la razón, al menos dejaremos constancia, para que nadie falsee la historia de Triana, de este expolio orquestado.

Y a usted, Sr. Delegado ¿por qué no le da por contarnos en su nuevo y carísimo blog dónde están los azulejos de su proyecto impactante y cuánto dinero hemos tirado al río? También nos podía decir cuándo abrirá de una vez por todas el Museo de la Cerámica del que le recuerdo que la fachada se está oxidando. Por último, Sr Delegado, le recuerdo que estamos en un estado aconfesional, deje de publicitar actos religiosos católicos o, al menos, comparta su espacio propagandístico pagado con dinero público con el resto de las confesiones religiosas que conviven en este barrio. Su apego con los que veneran el Becerro de Oro es muy sospechoso.

José Luis Jiménez

lunes, 17 de diciembre de 2012

EL DEDO DE RODRIGO


... Y GANARON LOS BUENOS

    Es difícil mantener la serenidad y correctos modales ante ciertos hechos, y uno acaba por despertar al malo que lleva dentro aún a sabiendas que tiene pocas posibilidades de ganar ninguna guerra. Porque está visto que no se pueden transgredir valores sagrados en la sociedad moderna, léase el dinero, el democrático voto, la presunción y el precio del apoyo de un cuerpo superior, más o menos divino; no comprende el malo interno que todo obedece a una presencia activa en un mundo regido por listos bajo la guía espiritual de un evangelio adaptado. Y para que no haya peligro de condena a los infiernos, sólo hay que justificar la bondad cristiana añadiendo dorados a las imágenes veneradas en la Casa común, donde no caben dudas sobre la honestidad, la generosidad y de cómo conseguir el Cielo aquí abajo.

    Todo se consumó. Otra batalla perdida, y con tan poco tiempo por medio como para hacerle un boquete a la quilla y hundir hasta el fondo este pesado e inútil bagaje de romántica querencia. La anterior batalla fue la de los azulejos con el nombre de TRIANA en el murallón de defensa de la calle Betis. Extraños señores se propusieron “salvarnos” y, contra acuerdos oficiales -traicionados- entre la Junta y el Ayuntamiento, consiguieron dejar el motivo de su enamoramiento con las humedades, pintadas y desconchones que lo adornan. Desde entonces no hemos visto sus bigotes asomarse por ninguna página de periódico denunciando el sempiterno abandono de lo único que les interesa  de Triana.

    Sí, se consumó: ya luce, por decir algo, en la fachada de la capilla de la calle Pureza el retablo de la Esperanza que Morillas pintó para el tejarero Joselito Ruiz Flores, ansioso éste por hermosear y convertir en altar el patio de su vieja industria, allí donde fue ocultada la imagen de la Virgen porque había que  preservarla de los disturbios de unas jornadas para el olvido. El tejar con el tiempo se convirtió en el escenario de trabajo de un grupo de artistas y artesanos, con lo que continente y contenido adquirieron un valor etnológico indudable que los políticos no han sabido, o querido, tener en cuenta. La llamada Casa de los Artesanos la adquiere un constructor y, como dueño que es, sin valorar que tiene dentro inquilinos legales que mantienen su resistencia, deja que los muros se vayan desmoronando y se arruine. Así que antes de que se caiga, dona el retablo cerámico, generosa y piadosamente, a la hermandad a la que perteneció Joselito que si resucitara se hubiera muerto de disgusto o, por lo menos, dado de baja en el listado de hermanos.

    Se consumó a pesar de lo mucho que hemos argumentado en este blog y por muchas que hayan sido las muestras de indignación por lo que se ha considerado un cruel ataque a los intereses del barrio. Porque para qué va a encargar la hermandad un retablo nuevo a ningún taller de Antillano Campos si se puede expoliar (¡huy, perdón!) el de la Casa de los Artesanos, que además se  va a estropear con lo bonito que es. Pues nada, que aproveche y a presumir...

    Hay que decir con claridad que una vez más el señor alcalde de la ciudad no lo ha sido de esta parte del río, como no lo fue en el asunto de los azulejos del murallón; el delegado tendría que haber hecho mucho más de donde pudo llegar el director del distrito con su interés. Carriedo, Aurelio Murillo, Jaramillo, Arcas o Alberto Jiménez-Becerril no hubieran consentido la tropelía de colaborar en la desaparición de un bien cultural único que, por desinterés oficial, está en franco peligro.

    A lo mejor el error ha estado en no conformar una plataforma como la de marras del murallón y así, claro, cómo se va a desfacer ningún entuerto yendo, además, contra los poderosos valores egoístas de la sociedad moderna. Por cierto: ni un sólo apoyo en prensa sobre este asunto desde la otra orilla y, además, los artesanos no parece que hayan entendido que había que echar toda la carne en el asador porque iban a correr como gamos para que nada pudiera hacerles devolver lo que arrancaron del corazón del barrio.  

    A partir de ahora muchos trianeros al pasar por delante de la capilla no querrán mirarla de frente, pero ellos allá; ¡y lo bonita que está...! Por cierto: ¿No queda un hueco para el otro retablo esperancista de la misma casa que conmemora una fecha histórica de la hermandad? ¿No les duele el estado lamentable en que se encuentra? Metidos ya en faena, que más da.

    En fin... Ahora a esperar al señor alcalde y demás autoridades para la ceremonia de inauguración; no  creemos que se vayan a privar del acto triunfal. Y a lo mejor también asisten los de la plataforma del murallón...
   

Ángel Vela Nieto.
   



sábado, 15 de diciembre de 2012

LOS DIBUJOS DE HELIOS GÓMEZ ESTÁN DE ACTUALIDAD

Dibujo de Helios Gómez publicado en Mundo Obrero en 1931.Cortesía de la A. Cultural  H. Gómez

El artista trianero de la calle Castilla mostraba en este dibujo, fechado en 1931, la situación social por la que atravesaba  el país. En Sevilla habían terminado los años de bonanza, propiciada por la Exposición Iberoamericana de 1929. Las tasas de desempleos eran altísimas y aumentaron alarmantemente las diferencias de riquezas entre los distintos  grupos sociales: los pobres cada vez eran más pobres y los ricos cada vez más ricos. La situación social desesperada radicalizó las posturas políticas y se sucedían las huelgas laborales y los incidentes y altercados callejeros. Familias enteras, sumidas en la más absoluta miseria, acudían a los comedores sociales, mientras que los restaurantes de las clases pudientes eran vigiladas por la policía para evitar el acercamiento de los más pobres.

Helios Gómez, a través de sus  ilustraciones en la prensa nacional e internacional, supo plasmar a la perfección la injusticia social de la época en la que vivió.  Sus  inicios en aquella Triana tan viva de principios del siglo XX sirvieron para que se impregnara del espíritu artístico, humanístico y solidario del Barrio. Compartió espacio y  tertulias con personajes de la talla de:
 Andrés Martínez de León, también pintor ilustrador. Socialmente comprometido y con muchos puntos en común con Helios Gómez: sus inicios como pintor de cerámica, su exilio a Madrid y a Rusia, durante la Guerra Civil combaten ambos en el bando republicano y finalmente son apresados y condenados.
José María Romero Martínez, apreciado intelectual conocido como “El Niño Sabio de Triana”, que como poeta fue el catalizador de la famosa reunión de poetas en el Ateneo de Sevilla, a la postre génesis de la más preciada generación de poetas españoles: la Generación del 27 y  como médico, desde su consulta de la calle Pureza, atendió a una ingente cantidad de personas sin recursos a los que, incluso, llegó a pagarles las medicinas.
 Amigo de los toreros gitanos Curro Puya y Cagancho y gran aficionado al Flamenco, Helios Gómez  fue un militante activo del movimiento obrero sevillano de la época.

Sin embargo, y a pesar de que han pasado más de ochenta años desde que Helios plasmara una de las  realidades sociales de aquella época a través del dibujo que encabeza esta entrada,  sus  ilustraciones están de actualidad y servirían perfectamente para encabezar las noticias de los últimos años.  Lean y aprecien, por ejemplo, su obra “Días de Ira”, que consta de 23 dibujos  acompañados de versos, y se sorprenderán como describen la realidad social del momento. Hasta el título de esta obra sirve para describir los días que estamos viviendo en nuestro barrio donde el nuevo Somatén, formado por los especuladores condecorados, las asociaciones religiosas que veneran al Becerro de Oro y el recién llegado poder político que los anima, nos han robado la Esperanza. Hasta “La Batalla de Covadonga” sigue estando de actualidad, lástima que en Triana abunden los “Llaneros Solitarios” y muchas Asociaciones Culturales con el único objetivo de montar un belén por Pascua.

José Luis Jiménez
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