martes, 28 de febrero de 2012

ACTOS PARA JUAN BELMONTE



Hoy que tengo tiempo y al cabo del tiempo quiero participar de nuevo y espero que no tenga que tirar la toalla otra vez.  Quiero participar con seudónimo porque el nombre  con el que firmaba lo que escribía era y es más largo que la SE-30 y además nunca lo ponían completo. O sea, o bien no me hacían caso o bien no se lo creían o bien se cansaban y tiraban por la calle de en medio. Lo comprendo, no es la primera vez que me pasa y  creo y espero que no sea la última.
          Me comenta Ángel Bautista y me lo confirma mi costilla que vio al señor delegado del distrito trianero en una emisora local de TV y durante la entrevista dijo que quieren recuperar para el turismo la historia y lo que va quedando de la parte histórica de Triana y además celebrar actos por el aniversario -50 años- de la muerte de Juan Belmonte ocurrida por voluntad propia el día 8 de abril de 1962 en su finca de Gómez-Cardeña en el término de Utrera.
         Desde estas líneas quiero dar mi modesta opinión, más o menos lo que le dije a Ángel en la calle San Jacinto. No soy amigo de recordar las muertes, ni voy a los entierros ni a los goris a no ser que sean de sangre, ni me gusta dar pésames, ni me gustan las visitas/estancias a las clínicas si no son también de sangre. No lo puedo remediar, me pongo malísimo y me dan mal vagi y pienso que cuando se va una vez se va otra y…¡joé!, que lo que quiero es que a la gente se le pase el mal rato y/o se ponga güena y hablar en las tabernas delante de un vaso de vino pesetero.
          Lo que le dije a Ángel es que si querían recordar en Triana la muerte de Juan que le hicieran un Gori-Gori en El Cachorro y ya está. Y ahí van fechas para recordar y celebrar efemérides:
         - El nacimiento no, que el día 14 de Abril de 1892 se le ocurre nacer en la Macarena.
-El día 20 de de Mayo de de 1909 se viste por primera vez de luces en Elvás (Portugal).
-El día 24 de Julio de 1910 inaugura la plaza de toros de El Arahal.
-En Agosto del 1910 y Domingo de Resurrección del 1911 torea en la Plaza de Toros de Sevilla y no hay nada que celebrar porque son dos petardos y en uno de ellos el novillo a los corrales.
-¡Celebración grande!. El día 21 de Julio de 1912 debut con caballos en Sevilla y lo llevan a Triana, a hombros y dando vivas y chillíos desde la plaza de toros al corral de la calle Pureza donde vivía.  Este  año hace 100 años de ese alboroto. (Ver en hemeroteca del diario ABC del 21/7/1988, pag 68. "LA GRAN FECHA DE LA TAUROMAQUIA" por Luis Bollaín.)
-26 de Marzo de 1913 debut con caballos en Madrí, con novillos de Santa Coloma.
-16 de Septiembre de 1913 alternativa en Madrí.
Emilio Jiménez Díaz me dijo que en un blog cordobés había visto un magnífico retrato donde estaban -en Córdoba- Juan Belmonte con Rafaé “El Gallo” y el padre de los Bienvenidas, Manuel Mejías Rapela “El Papa Negro”, acompañaban los restos de Machaquito hasta el cementerio de San Rafaé. Belmonte no podía faltar porque Rafaé González “Machaquito”  fue su padrino de alternativa, por cierto el segundo apellido del  “Machaco” era Madrid.

 Antonio del Puente

        
                    
     

jueves, 23 de febrero de 2012

EL DEDO DE RODRIGO: CRISIS DE IDEAS, INTERÉS O DE TIEMPO


Pues ese grupo de amantes de nuestro barrio parece que se ha reducido al mínimo; desde luego ha tiempo que dejó de ser “un grupo”. Suele ocurrir tras la euforia y predisposición que anima los proyectos similares, porque un blog como este se asemeja a una revista no venal y está demostrado que el ochenta por ciento perecen antes de que sus lectores lleguen a familiarizarse con ella, y es que el amateurismo es así: muchas ganas al principio hasta que va decayendo cuando ya hemos visto nuestra firma lo suficiente para demostrarnos a nosotros mismos de que somos capaces de escribir un artículo o, también, cuando creemos que hemos hecho lo suficiente como patriotas y defensores de causas perdidas. Y que nadie se sienta aludido, hablo en líneas generales.
         En este caso es profundamente lamentable, ya que se está poniendo en peligro lo que a todas luces es un vehículo de opinión absolutamente necesario, y no hay más que echar un vistazo en Internet a todo lo que lleva el nombre de Triana en la cabecera. Si este grupo estuviera compuesto por cofrades de una hermandad o, simplemente, amantes de la Semana Santa, tendría garantizado el futuro. Cuánto envidio a los capillitas que son capaces de fundar y alimentar una humilde hermandad y sacar sus pasitos con todo el orgullo y entusiasmo, amén de organizar durante el año rifas, actos de confraternidad, pregones y lo demás necesario que no debe ser poco. Pues esto es Triana por lo que se vé y se lee en las pantallas de los ordenadores: una cofradía que alguna vez hace parada en un bar.
         Creo que “Triana en la red” es de los pocos espacios donde aparece la Triana real en un sentido amplio; ha rescatado páginas histórica, liberados del olvido a personajes ejemplares, ha criticado -cuando había que hacerlo- la labor de la clase política que tanto influye en nuestras vidas y en el cuidado y respeto al barrio que nos preocupa; donde se ha hablado de toda la Cultura y todas las Artes que nos afectan como trianeros, en fin...
         Con tristeza veo cada día que las entradas se eternizan sin que nadie coja el testigo y así, parece increíble, vamos a llegar a las 50.000 entradas en poco más de un año. No sé si es mucho o poco para una página de este tipo, pero no parece que suene a fracaso (por cierto, veo que el contador de visitas ha dejado de funcionar, lo que faltaba...).
         La idea, a la que Emilio Jiménez Díaz dio el primer impulso, fruto de una ilusionada reunión, ha ido cerrando puertas y ventanas y ya le falta el aire. ¡Qué pena!

Ángel Vela Nieto

VEO VEO: PUENTE ENGALANADO


Desde hoy jueves 23 hasta el domingo se va a celebrar en Sevilla un congreso de floristas en Sevilla. Entre los diferentes actos que se incluyen en la programación, un par de ellos se van a celebrar en TRiana: el sábado a las dos de la tarde el protagonista será el puente y el domingo se realizará una ofrenda floral en la Capilla de la Esperanza y otra en Santa Ana.

Ya el otro día se pudo ver al puente engalanado con unos curiosos adornos florales: muchos paraguas de lunares colgaban a uno y otro lado de la barandilla cargados de macetas con distintas plantas, cuyos tiestos de plástico quedan escondidos bajo una estopa, del que asoman hermosas flores y hojas.


Las plantas que vemos en la calle nos alegran el día, sus colores y formas caprichosas nos hacen sentir que la vida es en sí bella, que si la cosa va mal debe ser culpa nuestra, embebidos como estamos en un sistema que cada vez prima más lo material y nos hace perseguir, como lobos hambrientos, los billetes que hasta hace poco servían para comprar casas en la playa, coches grandes, celebrar fiestorras y viajes dictados por las modas, como si la felicidad se escondiera tras las engañosas hojas coloreadas de las revistas.


Con que poquito se puede vestir un puente, con que poquito puede uno sentirse bien, es una cuestión de imaginación..

Rafael Martín Holgado.

miércoles, 15 de febrero de 2012

EL DEDO DE RODRIGO: EL DILEMA DE LOS CORRALES

   


Fachada del Corral de La Encarnación
   El tema de los corrales de vecinos siempre ha sido lamentable en Triana. Primero por lo que hicieron con ellos y con sus humildes moradores y, después, por la actuación de los poderes públicos respecto a la salvación, restauración o reconstrucción de algunos de los más significativos. Hace unos días la prensa local recogía que IU pedía la entrega inmediata de las llaves a los antiguos moradores del corral de la Encarnación, reconstruido con dinero público después de quince años de abandono y tras ser declarado Lugar de Interés Etnológico. Algunos de estos vecinos se hallan alojados en el corral del Cura también recuperado -de nueva construcción- por el Ayuntamiento de la ciudad y con la idea de amparar a los que han de salir de sus viejas casas mientras se les adecenta.


   El año pasado se anunciaba con las alharacas políticas de estos casos el fin de las obras del de la Encarnación... ¿Han visto ustedes la fachada? En una calle con tanta historia, plagada de construcciones horrendas, no hay una que se le pueda comparar... un edificio protegido por la Junta de Andalucía. Lamentable. De esto también se tendría que haber preocupado el señor Torrijos, que ahora da la cara por unos vecinos que han estrenado habitaciones en la misma calle. Recuerdo que en 1996 y en día de Velá, cansados de promesas incumplidas y con el temor de que se les cayera el techo encima, cortaron el tráfico; “La desvelá de Triana”, titulé un artículo en El Correo sobre  tan lamentable caso. Tres años después pedían la expropiación de la casa; la propiedad, como era usual, esperaba que sus inquilinos se fueran aburriendo o muriendo de una infección o bajo los cascotes de un derrumbe. Eduardo Corrientes, uno de sus antiguos vecinos, se erigió en adalid de la causa apoyado por una plataforma de defensa de los patios y corrales entonces existente. Pues ya ven ustedes: quince años; el admirable Eduardo no vivió para ver este nuevo corral que, de seguro, le hubiera causado un síncope.

   El edificio tenía una casa tapón con varias viviendas altas y un bar, el “Coruña”, con preciosos azulejos en su barra y un regidor, Alfonso, que había sido jugador de fútbol, deporte del que quedó cojo en una desgraciada jugada en el campo del Gijón. Alfonso tampoco llegó a ver lo que han hecho con su local, menos mal. Pues en ese edificio fantasmal -puerta cerrada a cal y canto- que aún llaman corral del Cura esperan unas familias que la cambien de Cava, de la de los civiles a la de los gitanos, aunque de esto ya no exista ni rastro; el más ruin negocio especulativo acabó con la histórica Cava.

   La Tenencia de alcaldía de la calle San Jacinto tendría que enviar un emisario al nuevo corral (el del Cura) para exigir que la puerta permanezca abierta, al menos hasta la noche, porque dispone, además, de una cancela. La gente tiene derecho a visitar el patio si lo cree conveniente, que para eso es de todos los sevillanos, como lo es el Hotel Triana, aunque sus privilegiados vecinos, con alguna excepción -casa y garaje en el corazón del barrio-, no quieran saber nada. Al corral del Cura tendrían que haber vuelto muchos de los que nacieron y crecieron en uno de sus tres patios y que fueron expulsados y condenados a vivir en barrios extraños; todavía algunos lloran por volver a Triana. No sabemos quiénes viven aquí ni por qué sellan la casa, no sé si es que pretenden que Triana se olvide de que existe y así vivir en la más completa independencia.

   En algún sitio he contado la vergüenza que sentí la noche del pregón y nombramientos cuando, con todo el nuevo Ayuntamiento presente y muchos visitantes, vi que las viviendas altas permanecía, salvo dos o tres, cerradas, y los pasillos completamente vacíos. Un boicot en toda regla a la fiesta centenaria de un barrio al que deberían amar, aunque sólo fuera por agradecimiento a su especial situación. Nada trascendió de lo que ocurrió, pero por muchos motivos que tuvieran para la protesta no era el día; poco les dolía Triana, sólo su (desconocido) problema, claro. Pues esperemos que el próximo julio los vecinos se comporten como lo hacían los antiguos, que hasta recibían invitando a cerveza. La casa la mantienen los actos que en su patio se organicen, para eso se salvó a costa de sesenta millones de las pesetas de los años ochenta. Que tengan en cuenta que cuando deje de servir a la comunidad dejará de interesarle su mantenimiento a la dueña, esa cambiante autoridad que vive en la Plaza Nueva.

   Corral de la Encarnación, corral del Cura, Hotel Triana, tres bienes que deberían ser admirables y admirados se han convertido en tres problemas. Y hay que solucionarlos.
  
Ángel Vela Nieto

viernes, 10 de febrero de 2012

TRAS LAS RAÍCES DE TRIANA: ESTÁ TRISTE TRIANA ESTA TARDE


 hoy se me van los ojos hacia las ramas altas
sin hojas, sin frutos, sin flores
y me parecen lo más frío de este invierno
por su interior una savia amarga apenas circula
sin fuerza, desorientada, desganada
se limita a cubrir espacios perdidos de vida latente
no pasa el tiempo porque ni el tiempo existe
en este vacío que me absorbe
pero recuerdo una higuera en el patio de mi infancia  


hoy viene el río cargado de lágrimas que bebo
se me resbalan los sonetos rotos de las manos
hecho un guiñapo me dejo caer en el suelo
frío, callado, ausente
recostado sobre un áspero tronco
levanto la cabeza en busca del viejo sol que me consuela
y encuentro una maraña de ramas retorcidas,
desordenadas, desconocidas, extrañas


pero me quedo mirando más arriba
entre la nada y el cielo azul de triana
callado, solo, más solo que nunca

Rafael Martín Holgado

domingo, 5 de febrero de 2012

EL DEDO DE RODRIGO: A VUELTA CON LA TORRE



El día 20 de septiembre de 1993 servidor firmaba una “Cruz de San Jacinto” en El Correo de Andalucía con el título “Menos torre quiero”. Empezaba así: “Antes vivir frente a una torre en Triana era un hermoso privilegio; torres tenemos ahora que como te toquen delante ya puedes echar al río la fe que te quede. Padezco la proximidad de dos de estas moles...”. Y me quejaba de una recién bautizada como Torre Maphre y de otra, enfrente, en el umbral de la mal llamada Isla de la Cartuja, cuyo astronómico coste aún estaba por coger más altura y que fue proyecto inválido para la Expo. Era lo único que recordaba al barrio donde se asentaba todo el tinglado, silenciado estratégicamente como parte de una ciudad que no debía imponer sus atractivos; por eso lo de “la isla”. La torre millonaria en cuestión es, claro está, Torre Triana; dos ataques frontales a un barrio revestido de una identidad de siglos. Torre Maphre, Torre Triana y... Torre Pelli, no hay dos sin tres. ¡Madre mía!, cuánto horror junto; es como cuando a un director le daba por reunir a varios de los monstruos famosos en una película buscando el no va más del alarido. 
El pasado jueves, Antonio Burgos le dedicaba su recuadro a quienes, desde el interés económico más flagrante, la apoyan argumentando que la obra da de comer a mucha gente.... “A casi todos la Torre Pelli no nos da de comer. Es más: hasta nos quita las ganas de comer, nos revuelve el estómago”. Así. Y señala Burgos a un alcalde, elegido democráticamente, que no sabe por donde tirar, y a un político-funcionario, altivo hasta la mayor antipatía, el señor Pulido de Cajasol, al que nadie de este pueblo ha elegido y que se va a permitir el lujo de llevar adelante su capricho. Sevilla le importa un comino, la Unesco otro comino y el alcalde dos...
Pero lo que, como trianero, me parece más llamativo del artículo es el epígrafe (“Trincar de la Pelli”) que el columnista de ABC le dedica al trianero ingeniero José Luis Manzanares Japón, quien desde la construcción de su puente -esto lo añadimos nosotros- ha visto crecer como la espuma el nivel de su empresa, convirtiéndola en una de las más importantes de España en su gremio. Por cierto que esperábamos de su patriotismo que repusiera de su bolsa generosa las banderitas que coronaban el puente y que el viento se llevó en las primeras rachas, o, al menos, que presionara a quien corresponda para que su obra se complete.
Manzanares está ligado sentimentalmente a la Peña Trianera, porque su padre estuvo entre los socios destacados; disfrutó de un espacio semanal en el mismo ABC titulado “El Altozano”, donde  daba riendas sueltas a su selecta sevillanía haciéndose llamar don José por un supuesto personaje popular del barrio, como Pemán con su “Séneca”. No recuerdo que rozara un sólo problema de los muchos que azotaban a su querida Triana en aquellos años; lo que si se apreciaba era un deseo de demostrar habilidades literarias... “Pulido es de Castro del Río y Manzanares es de Triana. Y con Ayesa (su empresa) es el Von Karajan técnico de este atentado a Triana”,  subraya Burgos.
Al señor Manzanares le han concedido todos los premios; hasta el de “Trianero de Honor” sin no haber hecho más que nacer en la calle San Jacinto; y seguro que no faltarán quienes pronto pidan una calle con su nombre. Se le ha alabado y premiado su pericia como empresario y más de una vez ha salido en la prensa la de puestos de trabajo que ampara y la relevancia de sus proyectos. “La Torre Pelli da de comer a Sevilla”, ha argumentado nuestro paisano, y ya hemos visto la reacción de Antonio Burgos que ha hablado por boca de los que no desean más ataques contra el paisaje urbano de una ciudad cuajada de historia.
A nosotros, simples vecinos de un barrio al que no cesan de hurtarle su riqueza, nos daña la vista esa horrenda mole absolutamente onerosa, faraónica e innecesaria, y nos sorprende y rebela la prepotencia del señor Pulido, muy conocido en su pueblo, la impotencia del alcalde y de la mayoría de los sevillanos a los que representa y, todavía más, la política de hechos consumados que parece que se ha asentado en esta ciudad desde que los señores Monteseirín y Torrijos se propusieron cortar una calle imprescindible por darle en la cabeza a los miles de manifestantes que los ponían verde.
Pues seguir “dando de comer”, señores Manzanares y Pulido. Siempre que la dichosa mole se interponga entre Triana y nuestra mirada nos acordaremos de almas tan caritativas.    
   
  
Ángel Vela Nieto
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