Tras el oportuno reposo y dos jornadas de Velá por medio -
con un gran ambiente y una buena organización, al menos hasta donde he podido
disfrutar- es momento de reflexionar sobre la mágica noche del pregón.
No pudo comenzar mejor el evento: recital magistral y
oportuno de la Banda Sinfónica de Sevilla, dirigida por el profesor Francisco
Javier Gutierrez Juan, dedicado a los 200 años de Rocío en Triana con momentos
muy originales y emocionantes, adornados incluso con el estruendo de cohetes.
Si hace dos años criticamos la elección musical de apertura del pregón este año
no podemos dejar de felicitar al joven director de la Sinfónica, tanto por la
elección como por la ejecución.
Reseñar también la contribución de Isabel Fayos con su bella
voz y presencia, incluso desde fuera del escenario.
Y el punto negativo, otro año más, la poca participación de
los vecinos del Hotel Triana; no se sintió la presencia de los mismos durante
el acto. Ellos se lo pierden.
Y ya rozando la medianoche
la entrega de los títulos honoríficos. No podemos dejar de felicitar a
nuestro amigo Emilio Jiménez Díaz, padre de este blog, por su título de
trianero de honor; un mar de tinta podría llenar con lo escrito sobre Triana.
Momento mágico el que protagonizaron Javier Traverso y
Matilde Coral. Siempre generosa la maestra con su barrio ya que casi nunca
falta a una cita importante. Mucho tenemos que agradecerle a la trianera que
ostenta más título y galardones, pese a
que todavía no dispone del de trianera de honor.
Caras de felicidad y satisfacción en el resto de los
galardonados a quienes felicitamos como se merecen.
Y para terminar la noche paseíto por la calle Betis para
contemplar lo bien organizadas que están las casetas, luciendo su nuevo exorno
y su hilo musical que esperemos sea respetado por el bien de esta fiesta.
José Luis Jiménez
Pues no parece que todo el mundo que participa en la fiesta esté dispuesto a respetarla; anteponen la política y es el camino más corto para acabar con una fiesta varias veces centenaria. A estos señores les da igual las normas de la tradición; van a lo suyo, a incordiar. Van a acabar hasta con Santa Ana, y nada de canciones que nombren vírgenes o santos... Tantos años soportando una dictadura y ahora hay quienes la echan de menos.
ResponderEliminarPues sí, Ángel. La contradicción es de órdago; quieren participar en la Velá de Santa Ana pero que no se hable de santos ni vírgenes. Y digo yo, ya que tienen responsabilidad en el gobierno autonómico, por qué no colocan la bandera republicana en los edificios oficiales como el Edificio que alberga la Presidencia de la Junta de Andalucía, que por cierto también tiene nombre de santo, en fin, como dirían los pescadores ante el peligro marino: "San Telmo, ¡sálvanos!
ResponderEliminarMagnífica la elección e interpretación de la Sinfónica, grandiosa Matilde Coral, excelente pregón, aunque aunque le sobraron unos minutos para ser perfecto.
ResponderEliminarY los Trianeros de Honor, en sintonía con la música de la Sinfónica, que se criticaba hace dos años en éste blog, han mejorado en el mismo grado, al igual que lo está haciendo el ambiente de la Velá.
Felicitaciones a todos los que hacen posible estos momentos mágicos como algunos de los vividos el pasado domingo en el Pregón y a los que están haciendo todo lo posible por devolver a La Velá de Sant´Ana la categoría de la fiesta que es y el lugar en que se encuentra.