Los que no están muy seguros de la
geografía trianera suelen asentar que El Guajiro estaba “en el sevillano barrio
de Los Remedios”; pues no, señor, la calle Salado está bajo la influencia del
Monte Marianillo; o sea, que no puede ser más Triana antigua y más flamenca su
huella; a pocos metros existía y existe la casa de vecinos que se conoció como
la “de los presos”. Todo esto dejando sentado que la barriada de Los Remedios
es tan Triana como cualquiera de sus otras barriadas satélites; otra cosa es
que algunos de sus moradores, llegados en aluvión de mil lugares distintos, se
sientan a gusto desconociendo las raíces del lugar donde llegaron a aposentarse
porque su economía lo permitió. La geografía histórica de esta orilla sigue
siendo la asignatura pendiente de algunos cronistas y críticos con una idea
insuficiente de los límites del arrabal.
El Guajiro, que abrió con tres socios
propietarios, Francisco Rodríguez (alias El Guajiro), Juan Cortés Hutton,
relaciones públicas del local, y Carlos al que, por su apellido llamaban “el
alemán. Es el primer tablao de Sevilla y feudo de la Triana flamenca, raro el
artista del arrabal que no pasara por su escenario; ellos lo mantuvieron. Fue
inaugurado el 23 de julio de 1952 al final de la antigua calle Tulipán, actual
Salado, aislado por el lugar que ocupó el cortijillo de El Guajiro, un
curioso personaje que iba montado en su caballo a todos los sitios y que
conservó su picadero justo detrás del tablao. El 12 de marzo de 1956 se
reinauguró tras una profunda reforma con una fiesta en la que La Paquera fue
la figura central.
En El Guajiro, del que se decía que era la sala de
fiestas más atractiva de Sevilla y quizás de España, presentaron su arte “en el
tipismo que encierra el marco de la sala”, nombres como Pepe El Culata,
Pepa y Matilde Coral, Rafael El Negro, Farruco, Los Hermanos
Rabay, La Pillina, Barrilito, El Moro, Manolo Marín, El
Bujero y tantos otros. Se anunciaba en 1961 a dos guitarristas “de solera”:
Manolo Brenes y Pedrito Sevilla, a la pareja Coral y Quiroga, al Trío Sevilla y
a la Orquesta del maestro Moradiellos “con un conjunto de profesores”.
Precisamente Moradiellos compuso una pieza titulada “¡Ay, Cortijo del Guajiro!”
que se solía interpretar antes y después del espectáculo. Desapareció a
mediados de los años sesenta.
Ángel Vela Nieto. De "Triana, la otra orilla del flamenco (2)"
Ángel Vela Nieto. De "Triana, la otra orilla del flamenco (2)"
En el guajiro estava de botones Pepito Delgado primo del musico gualberto .
ResponderEliminarMe gustaría saber en qué año se cerró el Guajiro. Gracias
ResponderEliminarMe ha encantado el artículo, me ha hecho retroceder en mi infancia. Me crie en las torres a 25 metros del Guajiro, concretamente el la calle Virgen del Buen Aire esquina José María Sáncez Arjona. Tengo ahora 64 pero recurdo de mi niñez el pasar sin fin de grandes artista y personalidades de la época. Mis tios y mis padres lo conocen muy bien. un abrazo y enhorabuena por este blog.
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