El semanario taurino, "The Kon Leche", dirigido por "Kurro Kastañares", que definía su línea editorial de esta guisa: "Sinceridad, imparcialidad y poca amistad con los toreros", era totalmente antibelmontista, pero con aquellos triunfos novilleriles de Juan Belmonte no tuvo más remedio que rendirse. En la portada correspondiente al 13 de abril de 1913, y con el título "Los maestros de hoy viendo torear a Belmonte", nos presenta al cordobés Rafael González Madrid "Machaquito", que fue precisamente quien da la alternativa en Madrid a Juan Belmonte el 16 de octubre de este mismo año; al madrileño del barrio de Embajadores Vicente Pastor; y al sevillano de Gelves José Gómez Ortega "Joselito", el gran rival de Belmonte en la época de oro del toreo, criticando al trianero por pura envidia.
MACHACO.- ¡Se arrima como yo! PASTOR.- ¡Aguanta como yo!
JOSELITO.- ¡Se adorna como yo! LOS TRES.- ¡Pero con borregos!
Texto y selección: Emilio Jiménez Díaz
Todo un descubrimiento... El torero era el héroe social, el gran personaje, el ídolo al que había que adorar. ¡Que tiempos!
ResponderEliminarBelmonte, como tú bien sabes, trajo en jaque a la prensa especializada y a muchos compañeros de su época. Él puso en boga los tres principios fundamentales del toreo moderno: parar, templar y mandar. ¿Borregos? No creo que aquellos toros fuesen "transgénicos" como los que ha fabricado Domecq para los "valientes" de nuestros días. ¿Se nota en esta portada la línea antibelmontista de "The Kon Leche"?
ResponderEliminarBelmonte no llegaba a la altura del lomo de muchos de toros que tuvo que lidiar, haciendo de la suerte de matar un auténtico prodigio. Torear entonces era un ejercicio casi suicida. No hay que olvidar que cada temporada tenía sus víctimas mortales.
ResponderEliminarEl estilo del Pasmo de Triana era fruto de su escuela, la escuela nocturna y al aire libre de la dehesa de Tablada, donde si no estabas encima del bicho éste se iba por las oscuridades. Primero fue un valiente, luego un torero revolucionario para acabar como un lidiador inteligente y único.
"The kon mala leche", tendría que haberse llamado la curiosa publicación.
Todas las revistas de aquella época, a excepción de "La Lidia", eran totalmente parciales.
ResponderEliminar