A Pepa Montes, con motivo de la entrega
de la Yerbabuena de Plata en su pueblo,
Las Cabezas de San Juan, el día 9 de julio de 2011
I
Saca la seda al tablao,
pon los flecos a tus pies,
vuelve ese mantón bordao
del derecho y del revés.
II
Taconeo a la medida
solo lo justo, pa qué
taconear sin descanso,
yo no hablo de claqué
de flamenco estoy hablando
III
Arabescos imposibles
pintan al aire tus dedos,
tus brazos tirabuzones
suben y suben al cielo
y al compás de una sonanta
quieren tocar los luceros.
IV
Miran la estrella y la Luna,
miran desde el olivar,
como meces la cintura,
como llevas el compás,
mientras desgarra la noche
un cante por soleá.
V
¡Ay, Pepa! ¡Ay, Pepa Montes!
Bailaora de Sevilla.
¿Por qué te cambia la cara
y el color de tus mejillas?
Porque me duele la sangre
bailando por seguiriyas.
VI
¡Ay, Pepa! ¡Ay, Pepa Montes!
¿Dime, quién te cambió el gesto
de la pena a risa clara,
como de la noche al día?
Es que me canta Triana
y bailo por bulerías.
VII
La risa sigue en tu cara
más flamenca todavía,
todavía más salada.
Más volantes, más lunares,
¡todo el sol de Andalucía!
Que me está cantando Cádiz
y estoy bailando alegrías.
VIII
¿Dónde va usté, Pepa Montes?
Bailaora de Sevilla.
¿Qué hace usté, cruzando el Puente?
Es que muero con Triana
y allí me esperan mi gente.
IX
¿Pero Pepa, Pepa Montes?
¿Dónde va usté, tan bien vestía,
con zarcillos de corales
y ese mantón de Manila,
formando la marimorena
con tanto garbo y majeza?
X
¡A recogé yerbagüena
a mi pueblo, Las Cabezas!
Antonio Fernández Cachero
¡Qué grande eres, Antonio... Versos copleros a la inmensa medida de Pepa.
ResponderEliminarCompleto es aún más hermoso.
ResponderEliminarGracias por compartirlo con nosotros.